El Caballo Marengo

A lo largo de la historia, han existido personajes que han dejado huellas en su país. Para lograr todas estas hazañas como es el caso de Napoleón Bonaparte. El caballo jugó un papel fundamental para sus movilizaciones. En esta ocasión, el caballo protagonista fue Marengo. Napoleón es conocido por haber sido uno de los más grandes conquistadores de la historia. Pero nunca iba solo. Siempre iba montado sobre un caballo. Uno de los más especiales fue Marengo, un precioso equino de raza árabe. Paso a la historia por ser el más famoso de todos. El Caballo Marengo se destaco en la cuadra de Napoleón, que se componía de unos 130 ejemplares para su uso personal. Otros de sus más famosos corceles eran Vizir y Blanco.

Características del Caballo Marengo

• Era un caballo de contextura fuerte e imponente
• De pequeña alzada, media aproximadamente 1,45 metros.
• Este ejemplar era de raza árabe y debe su nombre a la Batalla de Marengo que los ejércitos imperiales franceses ganaron en Marengo (Italia) el 14 de julio de 1800, fue importado desde Egipto en ese mismo año.
• Este corcel que vivió alrededor de 38 años desde 1793 hasta 1831.

Entrenamiento del Caballo Marengo

El entrenamiento al que fue sometido el Caballo Marengo, recreaba todos los escenarios de guerra posibles. Para ello se disparaban cañones cerca de sus cabezas, se desenvainaban espadas y bayonetas, se tocaban tambores, trompetas y se agitaban grandes banderas ante los ojos de los caballos consiguiendo que no se asustaran pasara lo que pasara. Para terminar su preparación como guerreros se hacía que perros y otros animales se movieran entre sus patas, logrando que el equilibrio del jinete no se viera en peligro en ningún momento.
A pesar de haber sido sujeto a un entrenamiento intensivo se cuenta que durante la trágica retirada del frente ruso. Por otra parte, Marengo acabó derribando a Napoleón cuando una liebre se levantó bajo sus patas.

Historia del Caballo Marengo

Marengo era un caballo muy inteligente, y además de muy rápido. Además, En tan sólo cinco horas, recorrió con Napoleón los 130 kilómetros de distancia que separa Valladolid de Burgos. Asimismo, llevó al emperador en varias batallas en la de Austerlitz, en la de Jena-Auersted, en la de Wagram y en la de Waterloo.
Lamentablemente, fue herido ocho veces en su carrera, y en 1815 fue capturado en Waterloo por Guillermo Henry Francis Petre, 11º Barón Petre. Petre lo vendió al regimiento de infantería de Guardias Granaderos, y estos lo trasladaron a una granja de Somerset donde vivió tranquilo y feliz hasta el final de sus días.

Muerte del Caballo Marengo

A su muerte, los propietarios cedieron su esqueleto por el valor histórico que tenía al Museo Nacional del Ejército de Sandhurst. Sin embargo, se quedaron con las pezuñas delanteras. Un artesano las repujó en plata hasta convertirlas en dos cajitas decorativas. Una de estas piezas acabó en el museo, pero la otra estuvo desaparecida durante casi 200 años.
Por su parte, el esqueleto de Marengo, que fue restaurado y recolocado con ocasión de la celebración del segundo centenario de la batalla de Waterloo, sigue siendo una de las atracciones del Museo Británico del Ejército, aunque sus cascos delanteros reposan en lugares diferentes.