Artículo #60 de la serie:
Gustavo Mirabal en Venezuela
Esto sí es verdad que no lo sabíamos
Isla Zapara Estado Zulia
Seguimos acompañando a nuestros viajeros. Esta vez de paseo por el Estado Zulia y nos hemos sorprendido con unos cuantos descubrimientos. Uno de esos descubrimientos fue el conocer las pequeñas islas existentes dentro del estado Zulia. Uno se cree que conoce todo y sabe todo lo que forma parte de su país, pero no es así. Cada vez que viajamos descubrimos cosas nuevas.
De dónde vienen estas islas
Se dice que las hermosas islas del Estado Zulia han surgido por los movimientos telúricos.
En la boca del Lago de Maracaibo, hacia el mar, hay islas muy bellas como San Carlos, Zapara, Toas, Pescaderos, Barboza, Zaparita o Nueva Zapara.
Hacia el centro, Capitán Chico, Providencia y Pájaros. Para visitar estas islas se toma una lancha en el muelle de El Moján, situado en el Municipio Mara.
Como siempre, con una emoción incomparable
Llegando al muelle vemos a María Gabriela y a Gustavo que caminan apresurados compitiendo para ver quién llega primero. La abuela paciente los sigue con la mirada, entendiendo la emoción que tienen al saber que van a conocer las islas del Zulia.
-Vamos a montarnos en esta lancha -dice la abuela Isabel Teresa a sus nietos. Iremos a las islas de Toas.
-Por favor señor ¿podría contarnos un poco acerca de esta isla? -pregunta la abuela al conductor de la lancha, luego que se han acomodado bien.
La isla más grande del estado Zulia
-¡Claro! ésta es la isla más grande del estado Zulia y, junto a la de San Carlos y Zapara, una de las más visitadas. La conozco desde que era un niño, tiene minas de piedra caliza, muy importantes para fabricar las casas y edificios. Está casi toda cubierta por médanos, con dunas de hasta 30 metros de altura.
¿Y qué son las dunas?
-¿Qué son dunas? –preguntó María Gabriela.
-Las dunas son pequeñas montañas de arena que cambian rápidamente de forma y tamaño por la fuerza del viento -respondió la abuela Isabel teresa.
Dunas de Sinamaica
Una gran elevación de tierra se ve desde la lancha, en aquel espectacular paisaje. Gustavo la observa y exclama:
-¡Miren qué alto es ese cerro! ¿Cómo se llama, señor?
“El Ojo”
-Los indígenas lo llamaban To’u…que significa “El Ojo”, porque desde la parte más alta del cerro, los Toas veían la salida y llegada de embarcaciones y el movimiento en las riberas. Además, el cerro guiaba a los marinos que se adentraban en las aguas del Lago. Desde To’u los indígenas al mando del cacique Nigale vigilaban el movimiento de los españoles.
-¿Quién fue Nigale? -pregunta Gustavo.
-Qué bueno que lo preguntas niño, porque en los libros de historia parece que faltan esas páginas. Nigale fue un cacique Caribe, que nació en la Isla de Zapara, que está en la entrada de la bahía El Tablazo, en la misma donde se encuentra Pequivén.
Pequivén
-¿Qué es Pequivén? -pregunta de nuevo el niño, deseando que le cuenten todo.
-Era una industria petroquímica, en la que se fabricaban productos que se sacan del petróleo, como el plástico, con el que se elaboran los vasos, las bolsas y muchas otras cosas.
Y el chofer vuelve al tema de conversación
-El cacique Nigale –continuó hablando el chofer- se dio cuenta de la necesidad de defender a los suyos, al lago y a sus tierras de los españoles. Pensó que para ello era importante tomar el control de las islas y de las tierras que hoy visitamos. De esta manera los españoles no podrían pasar a aprovecharse de la sal que el lago producía.
¿Qué pasa con la sal?
-¿La sal? -exclamó sorprendida María Gabriela.
-¡Sí, la sal!, el agua del lago no es completamente dulce, porque está en contacto con el mar a través del Golfo de Venezuela. Por eso, se forman salinas como las de la Ciénaga de los Olivitos, sumamente importantes para los españoles, y de la sal dependía su alimentación principal.
Para conservar por largo tiempo las carnes y el pescado, era necesario colocarles mucha sal.
Es un gusto hablar de todo esto y de la historia
-Me gusta contar nuestra historia, porque debemos recordar a Nigale y saber que el Lago de Maracaibo nos necesita, así como nosotros a sus aguas, peces, manglares, a sus buchones y a sus garzas.
La playa y el mismo Lago han sido la inspiración que nos hace cantar -concluye el señor poéticamente.
Nos contaron que…
Briceño Valera (2002) explica que en 1568 Don Pedro Ponce de León, quien gobernaba a la Provincia de Venezuela, deseaba lograr la salida al mar por Coro, lo que no se podía hacer en aquellos tiempos por la presencia de los Caribes al mando del cacique Nigale, de la etnia Añú.
Envió a muchos españoles bien armados, entre ellos a Alonso Pacheco, para tomar la puerta del lago donde estaban los Caribes, también por la vía de Maporo y Barbacoas para que se apoderaran de la Costa del Lago.
Nos contaron también que…
Lo que lograron al cabo de tres años, tras encarnizada lucha con los caribes, y así fundaron a Ciudad Rodrigo el 20 de enero de 1571. Pero la misma fue destruida por los Caribes al mando de Nigale y tuvo que ser reconstruida en 1574 con el nombre de Nueva Zamora.
Nos contaron que…
Se dio inicio a la construcción del puente Nigale, en memoria del cacique Caribe, perteneciente a la etnia Añú, quien en 1558 se enfrentó ferozmente a los españoles, convirtiéndose en símbolo de la resistencia indígena.
La colocación de la piedra fundacional del puente Nigale se realizó el 19 de octubre del 2005, en los límites de los municipios Mara y Maracaibo.
Una parte de este puente pasará por debajo del agua; y además contará con una línea férrea que pasará por La Guajira, atravesará el municipio Maracaibo, pasando por Mara, hasta Páez, y de ahí irá por la costa oriental, rumbo a Carora, estado Lara, para integrarse al sistema ferroviario nacional que construye el Gobierno Bolivariano.
La importancia de estudiar historia
-¡Qué importante es la historia; y aprenderla haciendo turismo es aún mejor! -expresa Gustavo, casi saltando de la lancha.
-Abuela, Gustavo y yo queremos hacer otro paseo en lancha- comentó María Gabriela.
-¡Claro! iremos primero a la isla de San Carlos, luego a los Puertos de Altagracia y, después, lago adentro, a un pueblito que se llama El Congo Mirador- contestó entusiasmada la Abuela Isabel teresa.
En la nochecita María Gabriela no puede dejar de escribir su diario
María Gabriela, aunque estaba cansada por el largo paseo en lancha y por las lecciones de historias aprendidas en el trayecto no se aguantó para escribir en su diario todas las cosas que había visto y para contar lo emocionada que estaba.
Querido Diario, aquí me tienes, no puedo dejar de escribirte. Aunque he venido otras veces al estado Zulia, tengo cosas muy lindas que contarte.
No te imaginas la emoción que siento, hoy volvimos a pasear en lancha y tu sabes que eso me gusta mucho. Bueno, nos gusta mucho a los tres, a Gustavo, a la abuela Isabel Teresa y a mí.
El descubrimiento de las islas
Además yo no sabía que dentro del estado Zulia hay varias islas y el señor de la lancha nos contó muchas cosas de estas islas.
Bueno, también es verdad que Gustavo y yo le hicimos muchas preguntas.
Qué hermoso se ve todo. Además vimos como unos médanos que realmente se llaman dunas y el señor de la lancha no los explicó. ¡Qué lindo es nuestro país!
Hasta mañana diario querido. Ya te contaré cosas nuevas.
Referencias Bibliográficas
https://gustavomirabalcastro.online/gustavo-mirabal/venezolano-gustavo/
https://gustavomirabalcastro.online/
https://gustavomirabalcastro.online/gustavo-mirabal/lo-que-esconde-gustavo-mirabal-castro-ii/
https://www.gustavomirabal.es/gustavo-mirabal/que-esconde-gustavo-mirabal-castro/