Cómodo, elegante y atractivo luce el uniforme de los jinetes y amazonas cuando salen a competir pero, ¿por qué usan ese estilo de atuendo y qué beneficios les proporciona? A continuación te lo contamos.
La ropa para practicar la equitación está hecha de seda, de ahí su nombre, las sedas. Este material permite a quien lo usa tener flexibilidad, comodidad y soltura además aportar elegancia y seguridad haciendo posible alcanzar un alto rendimiento.
El uniforme de un jinete está compuesto por varios elementos, el primero de ellos es el casco, el cual protege la cabeza en caso de caerse del caballo; el casco está hecho de resina o plástico, con materiales absorbentes de los impactos en su interior y recubiertos de tela exterior para que se vea más atractivo. La parte interna debe estar hecha de materiales acolchados, con el fin de proveer comodidad.
Cada jinete debe llevar una chaqueta, generalmente de corte clásico y suele venir en colores negro o beige. Para montar con tiempo frío o lluvioso se debe usar una chaqueta impermeable o cortavientos.
Le sigue los breeches o pantalones. Éstos se caracterizan por sus tejidos elásticos, resistencia a la abrasión y, también, al desgaste ya que son sometidos a mucho movimiento. Por ello, suelen tener badanas (refuerzo entrepierna) en las zonas más castigadas como protección contra los roces.
A todo lo anterior se suman las botas, las cuales pueden ser de cuero o goma, lo que sí es obligatorio es que sean altas y queden ajustadas al cuerpo del jinete o amazona. “Unas botas de hípica bajas pueden engancharse en la montura y dificultar el movimiento”, reseña el portal http://www.guiaspracticas.com.
Las polainas son otro accesorio que forma parte del uniforme de equitación y se colocan sobre las botas para incrementar la adherencia y permitir fijar mejor las piernas del jinete. “Generalmente cuentan con cierre mediante cremallera y tira autoadherente en la parte superior para evitar que se caigan. Los modelos con fuelle son más adaptables y permiten adaptarse a diferentes contornos de pantorrilla”, indica el mencionado sitio web.
Otro elemento que se aprecia en la indumentaria del jinete son los guantes, los cuales deben ser ceñidos para adaptarse perfectamente a la forma de la mano, finos para ofrecer una acción precisa en las riendas y fáciles de poner y quitar. También existen modelos de guantes cálidos para practicar con tiempo frío.
Así como los equipos de fútbol, los esgrimistas, los nadadores llevan un vestuario acorde a lo que practican, los jinetes y amazonas visten de acuerdo a su disciplina, sin embargo, cada elemento del vestuario se va adquiriendo poco a poco ya que para ser un jinete profesional se debe comenzar desde muy joven, montar y entrenar el caballo de propietario en particular, tener práctica en la pista de carreras hasta convertirse en jinete oficial y posteriormente profesional.
Fuentes utilizadas:
http://blog.equitacion.decathlon.es