La laminitis es una enfermedad que causa cojera en los caballos. Por eso, hoy te traemos un artículo sobre el tratamiento para combatirla.

Recordemos que la laminitis provoca una interrupción del riego sanguíneo en las láminas del casco del caballo.

Lo cual afecta la membrana basal de la pata, cuya función es la de unir la falange distal de la pared interna del casco.

Tratamiento

Si notas que tu caballo presenta dolor, pierde el apetito o no quiere caminar. Podría tener laminitis.

¿Cómo tratar esta enfermedad?

Paso número 1: Llama al veterinario

Tómale la temperatura al caballo, la frecuencia cardíaca y respiratoria.

Todo dueño debe contar con un estetoscopio que funcione y un termómetro rectal a mano, además que debe saber cómo usarlos en caso de emergencia.

Paso 2: No lo obligues a caminar

Si notas que no quiere moverse por sí mismo, déjalo tranquilo y busca tú la forma de llevarlo hasta el establo.

Una vez ahí coloca una cama de virutas gruesa, de 10 o 12 cm en su box.

Las virutas brindarán un almohadillado al caballo, lo que le ayudará a aliviar parte del dolor.

Paso 3: Colócale hielo

Mientras llega el veterinario colócale hielo debajo de las patas del caballo, tal como lo harías con una rodilla o un tobillo lesionado en una persona.

Puedes aplicarle el hielo al caballo usando un caldero o cubo con hielo y agua, o unas botas con hielo. No le dejes el hielo colocado durante más de 30 minutos.

Paso 4: El veterinario

En este punto hay que recordar que el veterinario es quien debe hacer el diagnóstico.

El tratamiento para la laminitis puede variar dependiendo de la gravedad de la condición; sin embargo, durante muchos años, la medida principal es hacer que tu caballo inicie un régimen de fenilbutazona, la cual es un potente antiinflamatorio.

Esto y el uso de calzado apropiado que brinde soporte son dos tratamientos empleados para ayudar a aliviar el dolor o la enfermedad.

Paso 6: Acepromacina

Este medicamento puede aumentar el flujo de la sangre hacia las láminas.

Esto ayuda a aliviar la condición en algunos casos. Más debes preguntarle al veterinario si se lo puedes dar.

Este también puede sedar a tu caballo hasta cierto punto, lo que le mantendrá calmado y hará que sea menos probable que sufra una lesión aún mayor